«Para ser un gran músico, antes
hay que ser una gran persona»
hay que ser una gran persona»
El joven trompetista Ambrose Akinmusire (Oakland, California, 1982) tiene todo lo necesario para convertirse en uno de los grandes del jazz: formación, respeto por la historia, técnica, vocabulario, expresividad, voz propia y, sobre todo, humanidad. Ambrose Akinmusire no se parece a nadie. A pesar de su juventud, ha aprendido de los grandes con los que ha compartido escenario (Steve Coleman, Wayne Shorter, Herbie Hancock), que le han ayudado a tejer un discurso que sorprende por su lirismo abstracto. Con solo dos discos como líder, tras «When the Heart Emerges Glistening» (Blue Note, 2011) ha desatado muchas expectativas sobre el futuro del jazz. Ambrose Akinmusire, junto a su quinteto, fue el encargado de poner en marcha en A Coruña Jazzatlántica, festival organizado por el Consorcio para la Promoción de la Música de esta ciudad.